Cuide su alimentación


  • Come con calma. Mastica bien y lentamente y concéntrate con la comida. Piensa que esto te hará comer menos, ya que la saciedad no llega al cerebro hasta 20 minutos después del inicio de la comida. Es muy recomendable “comer despacio” y “masticar pausadamente” evitando “engullir” la comida. Cambiar este concepto por el de “saborear”.
  • Procura no beber agua mientras comes. Esto te ayudara en tus digestiones. Puedes beber antes o un tiempo después de comer. Hazlo y verás como justo después de la comida no tienes esa sensación de hinchazón o pesadez.
  • Utiliza siempre formas de cocción que no precisen añadir ningún tipo de grasa: alimentos hervidos, al horno, a la plancha, al vapor, etc.
  • Elimina los alimentos en conserva ya que normalmente contienen un considerable exceso de sal.
  • Hidratarse adecuadamente. Ello no significa beber agua continuamente ni calmar el apetito a base de agua. Hay que beber para no tener sed y tener cuidado en situaciones especiales (calor, ejercicio físico, patologías, edades tempranas y tardías, etcétera).
  • Tener mucho cuidado con el alcohol. Acostumbrarnos a calmar la sed con agua y “degustar” otro tipo de bebidas, pero siempre con mucha moderación.
  • Administrar con mucho cuidado los postres dulces. No hacer del postre la razón de la comida y considerarlo más excepcional que habitual.
  • Hay que procurar consumir poca sal y condimentos. Los condimentos deben ser “invitados discretos” y no protagonistas.
  • Consumir pan en poca cantidad. Alternar el consumo de pan blanco y pan de semillas. El pan por sí solo no debe ser la “estrella” de la comida.
  • Mucho de lo que llamamos “hambre” o “necesidad” no son más que hábitos que nos perjudican y que desaparecen si nos lo proponemos.
  • Es muy recomendable almorzar y cenar temprano y establecer un periodo de 3-4 horas antes de irse a dormir después de la cena.
  • Tener cuidado con los alimentos “light”. Las calorías que ahorramos con su consumo las sumamos al ingerir más cantidad. A veces no son tan “light” y pueden no contener azúcar, pero sí mucha grasa.
  • Mantener un horario regular de las comidas principales: es importante regularizar la hora del desayuno, comida y cena, así el organismo se acostumbrará al horario de aporte de nutrientes y lo regularizará de la forma más óptima.
  • Ya que tenemos que aportar grasa al organismo, mejor elegir las que sean de mayor calidad, como es el aceite de oliva virgen extra. Este aceite proporcionará grasa a base de ácidos grasos monosaturados beneficiosos para la salud, además de de aporte de vitaminas y antioxidantes. Y reducir la ingesta de grasas saturadas: no es necesario eliminarlas ni mucho menos, sino que no tenerlas de consumo diario.
  • Los refrescos y bebidas azucaradas son una manera muy común de aportar muchas calorías y la gente piensa que no engordan tanto, pero lo cierto es que contienen mucha cantidad de azúcar y por tanto a largo plazo es un factor que contribuye a la obesidad.
  • Las dietas y alimentos milagro no existen. Antes de ponerse a dieta o realizar cualquier tipo de regimen lo mejor es ponerse en contacto con su médico y consultar en un gimnasio para que te adapten un plan individualizado.
  • Ser muy moderado en las cantidades. Nuestro organismo funciona mejor cuando comemos “bien y poco”. Está demostrado que se vive más y mejor comiendo pocas cantidades. Hay que huir de ser “avaricioso” a la hora de comer. Utiliza platos pequeños para no excederte en las raciones. No tomar como referencia lo que comen los demás, sino lo que uno necesita. Si aumentamos de peso es porque comemos más de lo que necesitamos, aunque sea menos de lo que comen otros.
  • Comer más frutas y verduras: Nos entregan un sinnúmero de vitaminas y minerales, además de rica fibra, ideal para mantener una Según la OMS: En general, 2,7 millones de muertes anuales son atribuibles a una ingesta insuficiente de frutas y verduras. En general, 1,9 millones de muertes anuales son atribuibles a la inactividad física.
  • No fumar: más de 440 mil personas mueren debido a enfermedades causadas por el uso del tabaco.
  • “Un día es un día”. Sí, siempre que no sea el “primer día” de una secuencia de varios días, podremos otorgarnos un permiso “ilimitado” para comer lo que queramos.